DON BOSCO

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"BUENOS CRISTIANOS Y HONRADOS CIUDADANOS"

TRUMP ASUME POSICIÓN PRO-VIDA



Por Steven Mosher
Population Research Institute,  21 de septiembre, 2016

A siete semanas de que los votantes acudan a las urnas, Donald Trump ha anunciado la formación de una coalición pro-vida. En una carta a los líderes pro-vida publicada el viernes, Trump invitó a los pro vida a unirse en una Coalición dejando muy claro cuál es la diferencia cualitativa con su oponente. Ese “contraste” se fortalece con los compromisos y la base pro vida del Partido Republicano cuyos votos  necesita para ganar.

La líder de esta nueva coalición es Marjorie Dannenfelser, quien tiene una larga trayectoria como presidente en la llamada “Lista Susan B Anthony”. Una de las organizaciones más respetadas e influyentes en el movimiento pro-vida de EEUU. https://www.sba-list.org/about-susan-b-anthony-list

La Lista de Susan B. Antony es ampliamente reconocida por tener la mejor "campaña de bases" entre los grupos pro-vida en el país. Desde que fue fundada en 1993 bajo la dirección de Dannenfelser, ha ayudado a elegir a más de 100 candidatos pro-vida a la Cámara de Representantes y 20 al Senado de EEUU. Su homólogo en el lado abortista, la Lista de Emily, fundada en 1985, dicen haber ayudado a salir electos a 19 senadores y 110 representantes.

Al ser entrevistada acerca de su estrategia para ganar a votantes indecisos y sumar votos para Trump, Dannenfelser señaló: "Lo que pocos parecen estar hablando y [que] debe ser explicado enfáticamente es que vamos a vivir en un país muy diferente bajo un Tribunal Supremo elegido por el eventual gobierno de Hillary Clinton. El derecho a la vida y la libertad religiosa arraigada en la Constitución será desvirtuado por décadas. Si no, permanentemente".

Al igual que muchos otros líderes pro-vida, Dannenfelser originalmente no era partidaria de Donald Trump y apoyó a otros candidatos en las elecciones primarias del Partido Republicano. Pero a medida que Trump ha fijado su postura pro-vida, Dannenfelser y otros líderes pro-vida se han sumado a su campaña. En mayo pasado, publicó una columna en la página web Townhallentitled "El asunto pro vida para Trump".

El contraste entre las posiciones de los dos candidatos a la presidencia de EEUU, como está ahora, no podría ser más polarizado con respecto al tema del aborto. Ambos son ahora prácticamente la expresión radical de las plataformas de su partido, con Trump oponiéndose al aborto, mientras que Clinton, como describe Dannenfelser, "se ha trasladado incluso a la izquierda de Barack Obama en su apoyo para el aborto a demanda y a expensas de los contribuyentes".

Clinton no sólo es compatible con el aborto por cualquier razón, sino que también pretende aumentar la financiación para Planned Parenthood con fondos públicos, a pesar de los recientes escándalos del gigante del aborto en EEUU. También podría derogar la bipartidista Enmienda Hyde, obligando a los contribuyentes pro-vida a violar su conciencia y pagar abortos.

Clinton también ha dejado claro que ella rechaza todas las restricciones sobre el aborto. Cuando se le preguntó en Meet the Press si los niños aún no nacidos tienen derechos constitucionales, ella sin rodeos respondió: "La persona por nacer no tiene derechos constitucionales". Incluso sugirió en otro discurso que "las creencias religiosas... tienen que cambiar" para avanzar en su agenda abortista, y se ha comprometido a designar jueces de la Corte Suprema para defender el derecho al aborto.

Por su parte Trump, en la citada carta a los líderes pro-vida, tomó una posición diametralmente opuesta a la de su oponente, y se comprometió a:

• Nombrar jueces pro-vida en la Corte Suprema de EE.UU..

• Aprobar la Ley de Protección al Dolor del Niño por Nacer que pondría fin a los dolorosos abortos tardíos en todo el país.

• Quitar los fondos públicos a Planned Parenthood si es que siguen realizando abortos.

• Hacer permanente la b para proteger a los contribuyentes de tener que pagar abortos con sus impuestos.

Al anunciar esta nueva coalición, Dannenfelser señaló, "Trump no sólo se ha reafirmado en sus tres compromisos existentes con el movimiento pro-vida sino que ha dado un paso más al comprometerse a proteger la Enmienda Hyde y los derechos de conciencia de millones de contribuyentes pro vida".

La Enmienda Hyde fue aprobada por primera vez por el Congreso en 1976, y prohíbe que los fondos federales sean utilizados para pagar abortos. Aunque no es una ley permanente, se ha ratificado cada año por el congreso, por lo general sin controversia.

Este año, sin embargo, la plataforma del Partido Demócrata, haciéndose eco de la posición de su representante, ha propuesto su derogación. Incluso el senador de Virginia, Tim Kaine, integrante de la plancha presidencial de Clinton, dice que se opone a la enmienda a pesar de que anteriormente apoyó la enmienda Hyde. Es claro cuánto arrastra el tren de la candidatura del Partido Demócrata.

El establecimiento de la Coalición Pro-Vida a menos de dos meses de que los votantes acudan a las urnas sorprendió a algunos observadores. Como Dannenfelser misma señaló: "Casi nunca ha ocurrido que un candidato asuma compromisos adicionales durante una campaña presidencial". Pero Trump que llega a la política en la parte final de su vida no es un candidato convencional. En el pasado ha tropezado al expresar sus opiniones sobre el aborto, dejando algunos votantes confundido acerca de su posición real.

Se añade el hecho de que este ciclo electoral es tremendamente atípico. Llegados a este punto, los candidatos presidenciales normalmente se mueven hacia el centro para capturar el resto de "indecisos". Nunca se radicalizan.

Hoy en cambio, con muchos votantes siendo desviados hacia candidaturas ni Demócratas ni Republicanas, las campañas de los dos partidos tradicionales parecen haber determinado que la clave para la captura de la Casa Blanca en noviembre es movilizar a sus respectivas bases.

Con el promedio de intención de voto de RealClearPolitics que tiene a Trump casi en un empate con Clinton a nivel nacional, la participación de las bases será clave.

Las personas de convicciones pro-vida constituyen uno de los grupos republicanos más fiables, lo que representa un tercio de todos los votantes que dicen que se identifican con el Partido Republicano. En su momento, las encuestas mostraron que los evangélicos blancos favorecieron Mitt Romney con 79% contra 30% del presidente Obama. Una reciente encuesta de Pew muestra que están optando por Trump con la misma fuerza. "Los evangélicos prefieren Trump tres a uno sobre Hillary Clinton," declaró el pastor Robert Jeffresssaid durante una reciente entrevista en 'Fox & Friends.' "El peligro no es que los evangélicos van a salir y votar por Clinton. El peligro es que no van a salir y votar en todas y quedarse en casa por millones como pasó en el 2012".

Por su parte, Dannenfelser dice "El contraste no podía ser más claro entre las dos propuestas, y me siento orgulloso de servir como Presidenta Nacional de la Coalición Pro-Vida a Donald Trump". La coalición se centrará en congregar al voto pro-vida en estados claves, de acuerdo con la experiencia de la Lista de Susan B. Anthony.